Existen tres tipos de nomencladores: de muro, de poste y de semáforo. Estos dos últimos incorporan pisos útiles. Los nomencladores tienen como finalidad la rotulación de calles de la ciudad con su respectivo número o altura y la comuna en la que estamos circulando; al igual que las paradas de colectivos, tienen un diseño que facilita la rápida y efectiva lectura.
Están construidos en aluminio, material amigable con el medio ambiente y durable por ser muy resistente a la intemperie.